Mavericks ruge y California tiembla. Los recientes e históricos récords de ola grande en Nazaré que os trajimos aquí han coincidido con un gran swell del Pacífico llegando a las costas del norte californiano. Los locales y tamañeros de la bestia estadounidense se dieron cita en los acantilados para encontrarse con joyas monstruosas como estas.
El Filmaker Timothy Ridenour estuvo en Mavericks cámara en mano para capturar la acción y demostró una vez más que no son solo los surfistas los que arriesgan cuando el oleaje es salvaje. “No tenía un barco o una moto para llevarme al pico“, se ríe Ridenour, “así que puse mi cámara en una mochila y ¡llegué remando en un longboard!”