Las imprudencias se pagan, y este turista de Palencia que visitaba Cantabria tuvo un percance serio por una de ellas: atravesó la zona de seguridad acotada en el spot cántabro de surf conocido como “El Farolillo”, en San Vicente de la Barquera, y fue arrastrado por el potente oleaje cayendo al mar. El hombre, de unos 40 años, paseaba por el rompeolas del puerto junto a su pareja y sobrepasó la verja cerrada que da acceso a la rompiente, entrando en la misma zona donde dos hombres fallecieron el año pasado por un golpe de mar.
Inmediatamente, al ver su caída a una zona rocosa azotada por las olas, dos surfistas, Patric Mainstone e Ignacio Pérez del Molino, acudieron a prestarle socorro, sacándolo de la zona con sus tablas y remolcándolo a tierra firme con heridas sangrantes en manos y brazos, contusiones severas y en estado de shock. Ambos surfistas, que no se conocían anteriormente, no dudaron en ayudar y cuentan que ya han participado en otros rescates salvando vidas de bañistas en peligro.
Desgraciadamente los rescates realizados por surfistas de bañistas o accidentados en peligro en España son muy comunes y mas aun cuando comienza el buen tiempo y en el otoño, épocas en las que muchas playas no cuentan con servicio de socorristas, restringido solo a los meses de julio y agosto. El grave problema de los surfistas sustituyendo a los insuficientes servivios de vigilancia costera lo tratamos a fondo en este articulo. Y si de rescates hablamos, como no recordar el que se llevó a cabo el año pasado, salvando la vida a un surfista escocés arrastrado por la corriente durante mas de 30 horas en dirección a Irlanda y que fue encontrado en alta mar, rescate que os contábamos en este reportaje. Surf seguro, turismo costero responsable, mucha precaución y cuidado con los oleajes de las marejadas invernales!
Playa de Meron, en San Vicente de la Barquera, Cantabria