8 RAZONES POR LAS QUE NO ODIAR EL PICO LLENO DE GENTE
Al mal surf, buena cara.
Ojo, haría lo que fuese por una ola sola para mi, pero a veces esto no es posible.Así que, ¿porqué no aprender de unas circunstancias no tan favorables?
La gente que se agolpa en el pico puede enseñarte unas cuantas cosas:
Te enseña a tener empatía…hacia los drogadictos. Cuando no consigues tu chute de olas, y te encuentras feliz, triste y enfadado mientras estás haciendo la actividad más divertida del mundo, te das cuenta de que eres uno de ellos. Siempre pensando en y necesitando esa siguiente dosis.
Te enseña a ser paciente. Tienes que esperar tu turno – con decenas de fieras todos con el mismo objetivo y pocas olas por serie, esperarás y mucho…
Te enseña a competir. Hay muchas personas en el mundo, por todos lados, así que si eres demasiado paciente no conseguirás tu turno, nadie consiguió nada siendo un maldito tímido. ¡Rema con fuerza y comprométete con la ola!
Te enseña gratitud. Cuando finalmente consigues esa ola que llevas todo el día esperando, es un momento para recordar, sabe jo**damente bien, te cambiará el estado de ánimo al completo, y empezarás a sentir extrañas emociones como la gratitud. Cuando pasas por esta fase te das cuenta de que todo tiene un sentido; el tamaño de la ola, la dirección, la marea, el viento, el tiempo, la temporada, el día de la semana, el hecho de que tus abuelos se conocieran y que eso diese lugar a tu nacimiento para que pudieses surfear esa ola de energía a través del agua en este universo.Pero ¡¿qué locura es esta?!¡Gracias mundo!
Te enseña a ser amable bajo presión. No solo esto, sino que cuando está totalmente abarrotado, tienes la presión añadida de posibles cargas de homicidio involuntario o familias destruidas a la vez que esa presión de coger la ola perfecta y disfrutarla.
Te enseña a luchar. Es posible (¡y muy probable!) que tengas algún altercado durante una sesión de surf con el lineup abarrotado. Algunas personas son muy posesivas de las olas y tendrás que aprender a mantener la calma y hablar de la reglamentaria para así evitar ese indeseable contacto físico.
Te enseña a hacer amigos. Estás permitido sonreír cuando estás en el agua. Hacer del tiempo de espera entre ola y ola más ameno es mucho más fácil si tratas a la gente de forma amistosa. Manda buenas vibraciones y ¡las recibes de vuelta!
Te enseña que necesitas estar dentro para poder ganar. Generalmente, hay gente porque coger olas es divertido, y es obvio que no cogerás ninguna si te quedas en el coche mirando, así que para dentro y a buscar esa ola única del día.